En medio de los cuestionamientos de líneas opositoras internas, este jueves se concretó la asamblea de la Sociedad Rural en la cual la mesa directiva conducida por Nicolás Pino logró con holgura renovar con la firma IRSA la explotación del predio ferial de Palermo, además de la venta de nueve departamentos y un edificio.

Con alrededor de 150 socios, la mayoría alineados a Pino, en la conducción destacan que "menos de diez socios" votaron en contra del principal punto en debate: la concesión de Palermo que se le renovará por 12 años a la empresa timoneada por Eduardo Elsztain.

La cantidad de presentes abonó las críticas previas de los opositores que cuestionaban una convocatoria "en pleno periodo de vacaciones". "Hubo muy poca gente, como era de esperar", se quejó un dirigente opositor a Pino. Pero en el oficialismo consideraron que se trató de una buena convocatoria.

Uno de los focos de discordia giraba en torno a los oferentes que quedaron relegados con la renovación a IRSA. Puntualmente, el malestar lo manifestaron en La Nación, que aspiraba a manejar el predio junto a Clarín.

Tras conocer que la Rural renovaría con IRSA, directivos de La Nación le enviaron a Pino una carta con duras acusaciones, asegurando que se vieron "perjudicados y traicionados en nuestra buena fe, honor y confianza construida a lo largo de décadas de cooperación mutua".

 Al llamarse a votación por la concesión de Palermo, sobre los cerca de 150 socios presentes, voces de la conducción sostienen que hubo "nada más que cuatro votos" en disidencia. 

De acuerdo al texto al que tuvo acceso LPO, aseguran que entre marzo y septiembre se dieron cuatro reuniones entre miembros de la consultora INFUPA (en representación de la Rural) y directivos de Exponenciar, la empresa integrada por Clarín y La Nación que organiza todos los años la muestra Expoagro.

El objetivo de esas reuniones era avanzar en el acuerdo para que Exponenciar se haga cargo de la explotación de Palermo, algo que, para septiembre, ya habían dado por hecho.

Tras conocer el cambio de parecer de las autoridades de la Rural y su opción por renovarle a IRSA, en Exponenciar señalaron que la razón esgrimida por la entidad es que "no quiere tener a medios como socios".

Socios de la Rural acusan a Pino de apurar una asamblea para renovar la concesión de Palermo con IRSA

Descreyendo de esas razones, reclamaron que se revise la decisión y se vuelva a incorporar a Exponenciar como la opción a votar por los socios en la asamblea de este jueves.

Finalmente, eso no sucedió. Al llamarse a votación por la concesión de Palermo, sobre los cerca de 150 socios presentes, voces de la conducción sostienen que "hubo nada más que cuatro votos en disidencia".

Con un emisario de La Nación presente en la asamblea de este jueves, Manuel Solanet, de la consultora INFUPA, respondió a la carta y explicó cómo se dio la compulsa entre cuatro oferentes.

"Se les respondió sin problemas, detallando que se cumplieron con los plazos de los pliegos y que la oferta de IRSA era superior a la de Exponenciar", dijo a LPO un directivo alineado a Pino.

La propuesta de Exponenciar -a 20 años de explotación- era un canon de 12 millones de dólares (en cinco cuotas anuales desde 2024) y garantizarle a la Rural en moneda dura el 75% del resultado promedio de los últimos 10 años, además de publicidad en La Nación y Clarin.

"La oferta de IRSA es más conveniente para la Rural, es continuidad y además se hicieron las obras que se tenían que hacer", detallaron cerca de Pino, sin precisar montos.

Además de la concesión de Palermo, la asamblea también aprobó "por amplia mayoría" la venta de nueve departamentos pegados a la tradicional sede de la Sociedad Rural, sobre calle Florida, como así también el edificio que la entidad posee en Olleros.